Análisis pop: Alla Cayó - Desorden Público.

Esta es la primera entrada de análisis pop: consiste en hacer un análisis cualitativo de material popular. Música, cine, fotografía son los objetos revisados. Para ello me valdré del método comparativo constante para los textos y el método iconográfico para trabajar imágenes. Esto implica posicionarme desde una visión posmoderna de la realidad (Vease Gergen, Berger y Luckmann, Pepper sobre el contextualismo).

Personalmente elegí esta canción por todas esas memorias de celebraciones de quince años (populares en Latinoamérica) durante el famoso episodio de la hora loca. Confieso que durante muchos años bailé la canción y brinqué a su ritmo sin prestar mayor atención a su letra. Años después la miraría con mayor precisión, con lo que quedé atónito. Es una canción de muerte con la que bailamos. Pensándolo bien, haciendo esto tiene como propósito mostrar su mensaje y conocer las reacciones de la gente.

Siempre he tenido esta relación ambivalente con Venezuela, es un lugar donde tengo el impulso de cultivar cosas nuevas, para mí era como este terreno fértil para construir cosas. Pero al mismo tiempo pensar en mi país me elicita temor, muerte, sentirme desprotegido y desamparado. A merced del caudillo de turno, sea por poder político o incluso poder armado (como lo que conocemos como malandro) formal o informalmente.

La violencia es un aspecto tan presente en nuestra cotidianidad que siempre me pregunto ¿Que hacemos con ella? Parece ser que esta canción nos da algunas ideas al respecto.

Sin extenderme en el contexto personal que me mueve a elegir la canción. Me gustaría mostrar los temas emergentes en el análisis.





La ciudad psíquica

Un aspecto que parece destacar la canción es el recuerdo que traen los lugares, nos muestra una ciudad que mas allá de sus espacios y barreras físicas, contiene recuerdos e historias.  El matiz peculiar de esos aspectos en las ciudades de nuestro país es que pareciera que el lugar común de los relatos de los venezolanos está en la muerte.

"Allá cayó, allá cayó, allá cayó, allá cayó"

La tiza en la acera sería el indicador, el símbolo que nos dice donde estuvo la muerte. El procedimiento usado para estudiar la escena del crimen. Una escena del crimen que es recurrente durante toda la canción, que da la impresión de no ser específico, sino que tiene un carácter generalizado (un aspecto que profundizaré luego) y frecuente en donde vivimos los venezolanos.

"Y dibujaron su muñequito e´tiza en la acera -que pena!"

En estas escenas del crimen no solo queda este símbolo, sino que quedan recuerdos, pesares, duelos y la subjetividad de quienes hacen vida en la ciudad. La calle no es solo el asfalto, la acera, el edificio o la infraestructura que todos podemos ver sin distinción, sino que es un recordatorio de muerte, así como el mismo tiempo lo es. Un lugar físico pareciera condensar dolor, angustia, relatos de homicidios compartidos a través del tiempo entre quienes viven las ciudades venezolanas. Y en esos lugares no solo queda registrado lo explícito, sino que contiene lo no dicho, lo que todos sabemos pero que no se habla, ahí su carácter incoloro, transparente que incluso pudiera ser invisible.

"Mancha la calle, mancha la historia, mancha de lágrimas incoloras, la ciudad madre que llora, inconsolable."

...

El escenario social

Uno de los aspectos destacables de esta canción es que está ubicada en un contexto cuyas características describe. Para ellos por medio de la sátira y la reproducción de diálogos cotidianos de los ciudadanos muestran las dificultades económicas de la población venezolana, señalando la exclusión y la pobreza de forma llamativa. En este caso las figuras heroicas en este contexto son iconos deportivos, o figuras reconocidas en los medios de comunicación. Estas figuras son traídas mediante la sátira para señalar los objetos de admiración de las personas.

"el hambre, el desempleo,  qué desgracia. ¿Quien nos salva? ¡Michael Jordan!"

En este escenario la frivolidad para actuar sobre el otro es valorada, y el actuar de manera consonante implica reafirmar un sentido de la oportunidad. Hay una sensación de desamparo en el que se imprime un desenlace fatalista, en donde la elección de delinquir pareciera ser ser la opción mas agraciada ante dicho desenlace incontrolable. 

"San frívolo te rindo culto, pago tributo entre tus altares, mundo de consumo sacando el jugo, de cualquier manera voy pa´la cárcel"





En este contexto el valor de las cosas se mide por el costo económico y el estatus social que dicho objeto represente y la adquisición de estos objetos valiosos es una necesidad, de obtención de símbolos de poder económico y reconocimiento social. Es el acceso a un símbolo privilegiado.

"¿Cuál es el tamaño de la moda de paso?
¿Cuánto me cuestan ese par de zapatos?"

La violencia es el medio para obtener estos recursos, el delinquir es obtener estos símbolos de poder y estatus, incluso cuando los mismos no parecen cumplir la funcionalidad original de dichos objetos. Es el ejercicio de la violencia física y psicológica para obtener unos zapatos que no calzan pero que están de moda. Es también exponerse a riesgos, andar de forma furtiva y  someterse dolor para obtenerlos.
"pero dame esos pisos -¡pum!-
que te quiebro bicho , medio muerto,
con la pata en el suelo
corra - aunque le duelan los pies-es
dese - aunque no sean de su talla"

La violencia es generalizada, protagonistas de distintos orígenes parecen no escapar de ella,  tiene un carácter letal y parece ser un aspecto con una fuerte presencia en el escenario donde se desenvuelve la canción.

"al cruzar la esquina guerra de pandillas balacera y una perdida vagabunda la espalda alcanza fulminate"


Los motivos de la misma y su secuela (la muerte) parecen ser indiscriminados. La canción pareciera mostrar este carácter indiscriminado de la violencia contando historias de personas con orígenes, relaciones, circunstancias y motivaciones distintas. En la cita anterior uno de los protagonistas muere producto de una circunstancia ajena al mismo, una bala perdida producto de una balacera entre pandillas. En la cita siguiente, el otro protagonista es asesinado en el contexto de deudas por el consumo  y tráfico de drogas.

"venga - sin saberlo ese va a cobrar
¿malapaga?, ¿quién lo manda?
blanca - se le veía en la cara
cara - pagó esa cuenta
cuentan - que amaneció en la acera
¿será - coca loca,
que el pez muere por la boca?
ay, ay, ay, - y a veces por la nariz"

...



Los protagonistas

En la canción nos cuentan historias de personas de orígenes distintos, con circunstancias distintas, personas inmersas en el escenario social previamente mencionado y que nos muestra la canción. Uno de ellos es un chico de trece años, cuyas motivaciones giran en torno a una virginidad perdida y la iniciación en la sexualidad. Este chico va cantando en un recorrido desde su escuela, va de salida. Y de forma imprevista es asesinado.


"Tarareando una canción
(chocolate, chocolate, chocolate)
va saliendo de la escuela
13 almanaques - dando vueltas
en su cabeza el cuento aquel 
virginidad que se pierde no regresa
no regresa pa´su casa
al cruzar la esquina guerra de pandillas
balacera y una perdida vagabunda la espalda alcanza
fulminate
(chocolate, chocolate, chocolate)
ahí quedaste."

Por otra parte la canción nos cuenta la historia de una persona cuyo estilo de vida gira en torno al consumo de droga. Donde esta persona puede realizar cualquier acción requerida para obtenerla, una de estas acciones implica un acceso inmediato que tiene un efecto a largo plazo. Este efecto pareciera ser con una deudas que pudiera ser un proveedor de la droga. La muerte en esta canción no solo se obtiene mediante la provocación o el ejercicio de la violencia, sino por la adicción también. 

Blanca - detrás de ti baila el loco
baila - el que aspira tenerte
vaya - fácil, pero nunca gratis
venga - sin saberlo ese va a cobrar
¿malapaga?, ¿quién lo manda?
blanca - se le veía en la cara
cara - pagó esa cuenta
cuentan - que amaneció en la acera
¿será - coca locaque el pez muere por la boca?
ay, ay, ay, - y a veces por la nariz
ay, ay, ay, - y a veces por la nariz
ay, ay, ay, - y a veces por la nariz
ay, ay, ay, - y a veces por la nariz

Ese contraste entre corrupción e inocencia pareciera mostrar solo lo que queda en común, ambos comparten el hecho de haber sido asesinados por armas de fuego, por ser parte de los relatos de la ciudad, por ser trazados por la tiza. Un aspecto, que en esta canción, es característico del escenario venezolano.

...

El poder ver con detenimiento esta letra tuvo un impacto importante, me sorprendió un poco que pudiera sentirme identificado con el contenido de una letra escrita ya hace un buen tiempo. Sobre todo por mis percepciones de Caracas, y Venezuela en general. En algún momento me recordó muchos de los hallazgos hechos por Verónica Zubillaga en sus estudios con jóvenes que han estado en situación de violencia. Esa sensación de desamparo, la caracterización de la violencia entendida no solo como la agresión en las relaciones, sino por la letalidad de la misma. Esto nos invita a repensar la forma en la que construimos y vivimos los espacios públicos. Un lugar no solo es la estructura física, sino que en el depositamos cargas emocionales, vivencias y funciones. Una esquina no es solo una esquina, sino que para cada uno de nosotros tiene una historia (indiferentemente de si corresponde con "hechos" objetivos). En ese momento en el que el prójimo te comenta, "alla cayó", ese lugar está contenido con muerte.

Así como lo está la ciudad. Una vez revisada la letra de esta canción me deja atónico la función que cumple en nuestras vidas, como un objeto recreativo sobre el cual se celebra la vida. Y creo que para lo que dice esta canción, es una ironía gigante.

Si me preguntan a mí. Ya no bailo esta canción en fiestas.

Las opiniones son bienvenidas para refinar los análisis. Comentarios, difusión y -me gusta- se agradecen de antemano.






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